La MSI B840-P es una placa base de alto rendimiento diseñada para soportar los procesadores de escritorio AMD Ryzen™ de las series 9000, 8000 y 7000, y presenta una arquitectura de socket AM5. Esta placa ofrece soporte para memoria DDR5 UDIMM con una capacidad máxima de 256 GB y velocidades de hasta 8000 MT/s en overclocking, lo que permite una eficiencia excepcional en tareas intensivas de procesamiento y multitarea. La compatibilidad con memoria DDR5 varía entre 5600 y 4800 MT/s de acuerdo con el perfil JEDEC.

En cuanto a la conectividad gráfica, la placa cuenta con un puerto HDMI™ 2.1, que permite resoluciones de hasta 4K a 60Hz, ideal para experiencias visuales de alta calidad. Además, ofrece 5 ranuras PCIe x16 que permiten una amplia gama de configuraciones de tarjetas gráficas o dispositivos de expansión. Entre las ranuras PCIe, se incluyen opciones de PCIe 4.0 y PCIe 3.0, ofreciendo flexibilidad según el procesador utilizado.

Para almacenamiento, la placa incluye 2 ranuras M.2 que soportan dispositivos de almacenamiento de alta velocidad hasta PCIe 4.0 x4, lo que permite una transferencia rápida de datos, además de soporte RAID para configuraciones avanzadas de almacenamiento (RAID 0, RAID 1 y RAID 10).

En términos de conectividad USB, la MAG B850 Tomahawk Max ofrece un conjunto completo de puertos, incluyendo USB 2.0, USB 5 Gbps tipo A, USB 10 Gbps tipo A y C, garantizando amplias opciones para conectar periféricos de alta velocidad. Además, dispone de Red Local 2.5G gracias al chip Realtek® 8125D, proporcionando una conectividad a red estable y veloz.

Para los entusiastas de la conectividad inalámbrica, la placa cuenta con soporte para Wi-Fi 7 (hasta 5.8 Gbps) y Bluetooth® 5.4, lo que asegura conexiones rápidas y estables en redes inalámbricas y dispositivos Bluetooth. Además, los usuarios pueden aprovechar los LED de depuración que facilitan la solución de problemas durante el montaje o uso.

La placa también cuenta con una serie de conectores internos, como ventiladores para el sistema de refrigeración, soporte para TPM 2.0 y múltiples puertos USB adicionales, lo que permite personalizar y expandir las capacidades del sistema de manera flexible.

Con un formato ATX (243,84 mm x 304,8 mm), esta placa base es una opción excelente para quienes buscan construir un equipo de alto rendimiento, con características avanzadas de conectividad, almacenamiento y expansión.